25-N: DIA MUNDIAL CONTRA LA VIOLENCIA HACIA LAS MUJERES

Hoy es el día dedicado a esta gran lacra social que afecta a mujeres de todo el mundo, independientemente de su estatus social o religión y yo no he podido dejar de leer esta carta publicada en el "20 minutos" de hoy, para recordar a todas las víctimas, tanto reales como potenciales. Darles un toque de atención para animarlas a denunciar a sus agresores con un testimonio en primera persona como éste, que pone los pelos de punta a cualquiera, por lo menos a mí...

Una vez más, llega el maldito 25 de noviembre, es decir, el día contra la violencia de género. Pero no se ha pensado que este maldito día no tendría que existir. No tendrían que existir mujeres a las que sus maridos o parejas maltratan física y psicológicamente, y qué decir de las que mueren a manos de sus parejas. Son familias destrozadas de por vida, hijos con grandes secuelas por lo que han visto y nunca podrán superar ni olvidar.
A todas las mujeres que están pasando por esto les digo que denuncien Yo he sido una de tantas mujeres que aguantaron a un maltratador durante casi 29 años. Me he pasado casi toda la vida siendo «un mueble», porque eso era lo que me decía: «Tú eres un mueble que yo he comprado, y haces, dices y te pones lo que yo te diga». Pero como todo en esta vida tiene un principio y un final, el 2 de mayo de 2005 me dio la última gran paliza para que yo abriese los ojos. Bueno, yo sola no, fue por los consejos de la Policía, los médicos, los enfermeros y, por supuesto, de mis dos grandes amores, mis hijos.
Un hombre que te humilla, te insulta, que tienes que hacer y decir lo que él quiere que digas y hagas, que no te dice ni lo que gana, que te engaña, que sale y entra cuando le da la gana, que te trata como un trapo de fregar y encima te pega. Eso no es un hombre ni merece la pena que se le mire a la cara.
Por eso, ahora, después de cuatro años y medio, me siento libre, aunque no del todo, porque después de tanto tiempo aún no nos deja vivir en paz: demandas y más demandas, ahora te quito esto, ahora lo otro… ¡Pero si se ha llevado todo! ¿Qué es lo que quiere? Que nos deje ya vivir un poquito en paz. A todas las mujeres que están pasando por esto les digo que denuncien. Y para todos los maltratadores, tolerancia cero.
F.V.

Otro dato escalofriante que se lee en los periódicos son los 800.000 niños españoles que son testigos de la violencia machista que sufren sus madres, de los que sólo un 4% reciben atención especializada. Se han creado multitud de recursos y estrategias para atender a estas mujeres, pero no existen recursos suficientes para atender a sus hijos. Por eso, desde la ONG Save the Children proponen que todos aquellos profesionales que realicen una intervención con estos niños tengan formación específica tanto en infancia como en violencia de género.

Para acabar, unas recomendaciones para personas que sufren violencia doméstica, por si os interesan, para no aburriros con un largo corta y pega.